Las 5 preguntas del Coach – La historia de Helena

Dibujos: Belén Ventin

Texto y grabación: Daniel Álvarez Lamas

Helena está preocupada y comienza la sesión contando lo que siente. El coach la escucha. Ella despliega todo lo que le pasa con mayor detalle, cuenta lo que siente… y empieza a comprenderse mejor, a reconocer sus emociones y qué cosas las provocan.

Entonces, el coach le hace la gran pregunta del coaching ¿qué quieres? Poco a poco, Helena va dibujando ese futuro que desea. Ya no quiere huir del presente hacia cualquier sitio, ahora ya tiene un objetivo.

El coach le ayuda a definirlo bien y a continuación le invita a explorar lo que hay detrás de ese objetivo. Para ello le ayuda a imaginar cómo es su vida una vez lo ha conseguido. Entonces, su cara cambia, Helena puede ya saborear aquello que tanto anhela. Esta herramienta se llama visualización.

Se crea así una imagen del futuro, algo que quedará en la memoria, paradójicamente, como un recuerdo del futuro… ¡Helena ya sabe cómo se siente cuando está allí! Ya sabe qué le mueve a conseguir ese objetivo, y el coach le pregunta ¿Para qué quieres conseguirlo? Helena se da cuenta de que lo que le mueve son sus valores… La libertad y la alegría que conseguirá en ese estado deseado y que ya ha sentido al visualizarlo.

Una vez que el objetivo está claro, el coach ya puede preguntarle ¿qué te lo impide? Helena ahora ya puede distinguir, de entre todos los problemas que veía, cuáles son los obstáculos que debe salvar para alcanzar ese estado deseado. Ya no se siente en un lugar sin sentido lleno de problemas, ahora tiene una orientación clara, graciasal objetivo…

…que además le motiva enormemente, por lo que la siguiente pregunta cae de cajón: ¿Qué puedes hacer diferente?

Con el maravilloso estado que le ha dejado la visualización y la claridad en la orientación, a Helena le vienen nuevas y poderosas ideas, toda su creatividad, se da cuenta de que no había valorado suficientemente sus capacidades y también descubre alguna creencia limitante que estaba impidiéndole ver nuevas opciones. Es decir, ahora Helena dispone de todos sus recursos.

Por fin, llega el momento de organizarse. Ya tengo recursos, obstáculo y objetivo claros. ¿Cuál es el primer paso? Incluso puedo hacer mi plan de acción. “¡Es momento de ponerse marcha! No quiero esperar ni un momento más”. El coach le ayuda a clarificar las tareas.

En las siguientes sesiones Helena y su coach siguieron trabajando juntos.

Revisaron las tareas y se pusieron otras, modificaron el plan en función de los nuevos obstáculos. Descubrieron nuevos recursos…

… ¡Hasta conseguir el objetivo!

 Helena ya vuelve a ser la de antes. Le está muy agradecida al coach. Él está muy contento de ver así a Helena. Sabe que es sencillo siempre que no pierda los tres ejes del coach:

1. Escucha que muestra plena confianza en que ella será capaz de conseguir lo que se proponga.

2. Estado poderoso para sostener sus emociones difíciles con equilibrio y para contagiarle la confianza en sí misma.

3. Un proceso metódico: saber lo que Helena necesita pensar en cada momento para conseguir su mejor versión. Ayudarle con esta secuencia de las 5 preguntas del coach.

1. ¿Qué quieres?
2. ¿Para qué quieres conseguirlo?
3. ¿Qué te lo impide?
4. ¿Qué puedes hacer distinto?
5. ¿Cuál es el primer paso?