Para la campeona de poker May Maceiras, la comunicación no verbal es más que un juego
Tengo la gran suerte de trabajar con May Maceiras, campeona de España de Poker (masculino y femenino, mujeres al poder!). May da clase de lenguaje no verbal en nuestros talleres. Es asombroso como describe lo que está sintiendo una persona en base observar su comportamiento.
Al finalizar una clase le pregunté por una de las escenas de una partida que puso en vídeo:
«¿Se puede descubrir que un jugador tiene un farol porque mira a las monedas apostadas y no a las del otro jugador?»
(Habíamos visto una jugada en que un jugador lo hacía en el momento de tomar la decisión).
Lo me explicó, básicamente, podría darse cuando un jugador está decidiendo, tiene lugar un proceso mental protagonizado por la imagen-pensamiento de lo que desea; en este caso, el dinero apostado sobre la mesa.
(Como se está echando un «farol», no puede aspirar a ganar el dinero del otro… En caso de que le vea la apuesta, lo perderá todo)
Es posible que hayas intuido ya la gran pregunta… «¿Se puede conocer lo que piensa cualquier persona a partir de su comportamiento?»…
Esto no es más que ir un poco más allá en algo que ya creemos: «Se puede saber cuáles son los pensamientos de una persona por su lenguaje no verbal».
Disciplinas como la PNL, la neurociencia o, en general, personas con gran empatía, estudian también la interpretación de lo que hay detrás del comportamiento de una persona. Ojo, el que esto sea posible no quiere decir que siempre acierten.
No olvidemos que somos ANIMALES, y como tales lo más valioso que tenemos es el instinto, que permite detectar micromovimientos de la cara, y ya no digamos movimientos amplios de la cabeza, manos, brazos, pies y piernas.
La clave para CONECTAR con los pensamientos de otra persona será meterse en los zapatos del otro, desinhibir el instinto… Y entrenarlo para ser cada vez más sensible.
¿Y cuál es la clave para EMITIR un buen lenguaje no verbal? Pues, paralelamente, sentir la actitud y emociones adecuadas. Esa es la unica forma de que el animal que tenemos enfrente no vea mensajes no verbales que interfieran en la comunicación.
Así, no nos queda otra opción que sentir y honrar al máximo ese momento… Una comunicación verdadera va más allá de las palabras.
Por: Daniel Álvarez Lamas, Editor de OEC.