¿Quieres que tu vida despegue?
¿Quieres que tu vida despegue? Imagínatela tal y como quieres que sea. Si tu mente puede imaginarla, ten por seguro que hay un modo de crearla.
Imagina un equipo de baloncesto o fútbol, o una orquesta de música. Cada jugador, cada músico, tiene un instrumento para tocar o una jugada maestra que le hace único e imprescindible para el equipo. Para hacer espectáculo en el fútbol o hacer que el concierto sea espectacular, cada uno tiene que interpretar su propio papel, no el del otro.
Cada uno de nosotros tenemos un instrumento que nos hace únicos e irrepetibles. Todo lo que nos llega (información, libros, amigos, trabajo, experiencias propias o ajenas) lo procesamos y después lo compartimos con el mundo con nuestro propio sello. Todo lo que compartimos, deja una huella única y personal.
¿Qué nos hace preferir ser del montón cuando tocamos un instrumento que nadie más puede tocar? Creo que es una “creencia” que se nos inculca desde niños. De niños expresamos nuestra energía, nuestra alegría o nuestra pena y somos constantemente corregidos. De forma inconsciente asumimos que es mejor ser del montón que destacar. Según crecemos nos acomodamos siendo del montón.
Como dice Marianne Williamson ¿Quién eres tú para no ser brillante, genial, talentoso y fabuloso? Hacerte pequeño no sirve al mundo.
Cuando tú tocas tu instrumento y yo toco el mío, el mundo funciona.
Entonces ¿cómo podemos ser nosotros mismos entre tanta interferencia? La interferencia puede venir de tu familia, de tus amigos, de tu jefe o compañeros. Pueden estar cargadas de buenas intenciones, pero impiden que nos veamos a nosotros mismos. Hay mucha gente ahí fuera que no quiere que suene tu melodía. Tratarán de inculcarte ideas con respecto a ti que te resultarán abrumadoras. Pondrán a prueba tu compromiso contigo mismo.
1.-Quédate en silencio y mira hacia dentro todo lo que puedas. Cuando no miras hacia dentro es que miras hacia fuera en la medida en que te ocupas del mundo exterior
2.-Cuando mires hacia dentro, acepta lo que ves o :
3.-Si no te gusta, cámbialo.
4.– Los griegos dicen “Me pierdo cien veces, no, mil veces, cada día”. Si te pierdes a ti misma, acuérdate de volver.
5.-Escucha a los demás y escucha sus ideas, observa y decide si te valen o no, pero no tienes por qué identificarte con ellas.
Así que ¿quieres que tu vida despegue? Pues imagínatela y a por ella. Decide si cada uno de tus pensamientos, tus palabras y obras están alineadas con esa idea. Si lo están, sigue creando y materializando. Si no lo están, cámbialos.