Entrevista a María Ortega sobre su experiencia en «Tu Camino, conecta con tu mejor versión»
¿QUÉ DESTACARÍAS DE ESTE PROYECTO “TU CAMINO, CONECTA CON TU MEJOR VERSION”?
La sorpresa de conseguir este Reto. A priori, parece algo sencillo, me lo tomé como senderismo a lo grande acompañada de otras personas con inquietudes similares. Y supuso un aprendizaje “por sorpresa” y un descubrimiento.
DIME MARIA, ENTRE TODAS LAS EXPERIENCIAS DE TODOS ESTOS DIAS, ¿CON QUÉ MOMENTO TE QUEDAS?
Con el momento en que decides si manda tu cuerpo o manda tu mente, cuando físicamente no puedes más pero tienes una meta a la que no has llegado. Cómo la mente moviliza esos recursos que no sabes que tienes pero que aparecen para animarte a llegar. Hubo un momento en que mi cuerpo libraron una batalla importante pero finalmente llegué a la Meta, porque mi mente supo convencerme, desarrollar argumentos e incluso darme la fuerza que mis pies necesitaban.
Y SUPONIENDO QUE VA A HABER PRÓXIMA VEZ, ¿QUE HARÍAS DIFERENTE?
La preparación de la mochila. Inicialmente consideré que físicamente estaba preparada, y obvié detalles que una vez en marcha supusieron un hándicap. Aprendí que un reto diferente siempre requiere recursos diferentes y preparación consciente.
CUÉNTANOS, ¿QUÉ TE ANIMÓ A EMBARCARTE EN EL CAMINO?
Tenía dos cosas que me atraen mucho. Por un lado, El Camino de Santiago, sobre él todo el mundo me decía que es una experiencia que hay que vivir “que no vuelves igual”, el entorno, los paisajes de Galicia que recorres, y por otro, el enfoque hacia el Desarrollo Personal que este Proyecto aportó. Me parecía que el Camino supone un sitio perfecto para empezar a profundizar en él.
IGUAL QUE EN UNA SESIÓN DE COACHING DÓNDE SE PUEDE PREGUNTAR AL CLIENTE QUÉ SE LLEVA DE ESA SESIÓN, ¿QUÉ TE LLEVAS DEL CAMINO?
Sobretodo dos cosas, una, la unión de un Grupo que se creó de manera espontánea, basada en una solidaridad y compañerismo no hablado pero que se respiraba alrededor. No sólo éramos un grupo de gente andando con inquietudes comunes dirección Santiago, disfrutando y apoyándonos, sino que creamos una energía diferente para todos nosotros. Y lo segundo, como tu decías antes, esa energía que dejamos en el Palacio de Congresos como recuerdo de una fuerza que impulsa que te dice que si una vez pudiste vencer un reto lo podrás hacer más veces. Y además, las ganas de completar las etapas pendientes..
POR ÚLTIMO, ¿RECOMIENDAS ESTA EXPERIENCIA?
Sí, rotundamente, creo que tienen razón todos aquellos que dicen que el Camino engancha y que no te deja indiferente. Creo que es un proceso de aprendizaje propio muy interesante y enriquecedor.
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